Libros para regalar

Hace tanto que no hablo de mis últimas lecturas que se me ha acumulado el trabajo. Desde aquella última entrada hemos pasado por el mes de las autoras (sí, en femenino), de los autores y autoras autopublicadas (aquí ya no hay distinción de género), por el día del soltero chino (en el resto de países no se celebra estar soltero, aunque debería) y tenemos el black friday y la navidad a la vuelta de la esquina.

Estoy segura de que los libros son un regalo obligado, y más si se dan en invierno, con el frío y las ganitas que nos entran a todos de perrear en casa sin mover el culo sino tirados en el sofá debajo de una manta.

Agárrate, coge papel y boli y apunta en tu lista de regalos. 

 

9 meses y siete días de Gloria Plaza Medina.

Conocí a Gloria en un directo de Instagram que compartimos, para que veáis que soy moderna y que a mí las redes sociales solo me traen cosas buenas. 

Nada más terminarlo me descargué su libro (previo pago, no a la piratería) y me lo leí del tirón. Como su título da a entender es una divertida historia del embarazo sorpresa de una mujer en la treintena. Golpes geniales, amigas locas como cabras y una abuela que es para ponerle un piso aunque sea ella quien ocupa el piso de la nieta. 

Una lectura amena y genial para dibujarte una sonrisa durante unas cuantas tardes otoñales. 

 

 

Un cadáver muy frío de Ana Bolox

Aunque no soy una apasionada de las novelas de detectives, esta me conquistó a primera vista. La acción se desarrolla en los tardíos setenta, cuando Los ángeles de Charly nos regalaban sus ajustados pantalones de campana y una visión elegante de la lucha contra el crimen. 

La protagonista es una elegante dama de la alta sociedad aficionada a la resolución de crímenes y experta en colarse en las investigaciones policiales sin invitación previa. 

Narrado sin un extra de sangre ni violencia gratuita, Anne Starling me ha ganado para su causa. Protagoniza varias novelas que estoy segura leeré. 

 

Una familia feliz de David Safier

A pesar una fanática desmedida de este autor, no me ha conquistado con esta historia como lo hizo con todas las demás que me he leído. 

Una familia se ve envuelta en la maldición de una bruja y se transforman en unos monstruos, los mismos de los que iban disfrazados contra su voluntad para asistir a un acto social obligados por la madre.

Aun reconociendo que tiene golpes magistrales, no me ha cautivado como otras obras del mismo autor, pero he de reconocer que tiene su gracia y su moraleja. Sobre todo si tienes un par de retoños que se llevan como el perro y el gato y uno de ellos está en plena adolescencia. 

 

Gente normal de Sally Rooney

Lo que empieza con la típica historia de chico popular de instituto se ve en secreto con la chica más impopular termina convirtiéndose en una lectura intimista, llena de luces y sombras y con un retrato muy veraz de las relaciones tóxicas. 

Connell y Marianne, los dos protagonistas, se pasan las más de 200 páginas en un ir y venir constante que les hace daño y bien a partes iguales. 

Un libro muy bien escrito y con la capacidad de envolverte en el ambiente que rodea a los personajes. 

 

El mito del chiringuito de Mar del Olmo (una servidora)

Para ser sincera, no me lo he leído otra vez, pero sí me lo he reído un poco más. 

Por si no te has enterado (y mira que es difícil porque lo he cacareado de lo lindo) he publicado mi segunda novela. 

Si te leíste y disfrutaste de 45 días por año no puedes perderte este. Mismos personajes y alguno más nuevo que hará las delicias de todos aquellos que gusten del humor ácido de mi pluma. 

 

Hoy lo dejo aquí porque no quiero abusar de ti y tu tiempo. Seguiré en breve para darte recomendaciones de cara tus regalos. Este año, con el miedo al desabastecimiento, deberías pensarlo ya, que luego vienen las lamentaciones.

Por cierto, del apagón y otras catástrofes hablaremos en otra ocasión.

Pero no quiero dejarte sin pedirte que me escribas y me digas qué libros te has leído en estos meses que te he librado de mis entradas en el blog. Así me inspiras para próximas lecturas. 

Nos leemos.